miércoles, 18 de noviembre de 2009

Libros y viajes contra el Capitalismo feroz

Nuestra sociedad occidental está disfrazando el conocimiento, que ante todo debe basarse en la experiencia única y personal, con la información manipulada. No se trata de demonizar a ningún medio tecnológico ni de conspiraciones para dominar el mundo; simplemente hay una larga cadena de intereses económicos que fagocita seres humanos desde Getafe a Maputo pasando por Los Ángeles. Hay que rebelarse, buscar por uno mismo entre esta jungla de información intoxicada y no dejarse aleccionar tan fácilmente. Leer y viajar son dos buenas fórmulas para buscar conocimiento. Porque está claro que para descubrir otros mundos desde al menos hace quinientos años, los occidentales emprendemos un viaje o leemos una novela, a pesar de que otros medios como la televisión o Internet se hayan añadido recientemente. En ocasiones, el mundo que descubrimos en esos libros nos cautiva para siempre, hasta que necesitamos darle continuidad a la narración más allá de lo leído. Y es que el buen lector aprende en solitario, por instinto y por sí mismo, se crea sus criterios propios que le llevarán a elegir aquellas lecturas que más le aporten. Así será más difícil permitir que otros piensen por nosotros.
Os dejo dos recomendaciones: un libro y una canción. Alfonso Armada publicó en 1998 "Cuadernos Africanos" (Ediciones Península, Altair viajes), crónicas de sus viajes por África central. Han pasado 11 años y desgraciadamente la situación no ha cambiado, así que puede considerarse un libro de actualidad que cuenta esas historias que no salen en los medios de comunicación españoles. Ya sabemos que lo que se nombra, no existe, por eso desde este rincón de Internet no dejaremos de recordar Guinea Ecuatorial, Congo, Burundi, Mozambique...
La canción es un clásico del Boss, incluido en la edición de Born in the USA del año '84 y grabado posteriormente en versiones acústicas y en directos. Trata de seres humanos con sueños propios, que luchan contra la vida diaria y se apoyan los unos en los otros para no desfallecer... un hermoso canto a la solidaridad y un himno para seguir en la brecha: "No Surrender!"


Una traducción libre de la letra:

Nos largamos de clase, teníamos que alejarnos de aquellos idiotas
Aprendimos más de una canción de 3 minutos que de todo lo que nos enseñaron en la escuela

Esta noche escucho un sonido cercano de tambores
y puedo sentir que mi corazón empieza a latir.

Puedes decir que estas cansado y que tan solo quieres cerrar los ojos y abandonar tus sueños
Pero hicimos una promesa y juramos no olvidarla:
No retirarse, no rendirse
Como soldados en una noche de invierno con una posición que defender:
No retirarse, no rendirse
Ahora los rostros jóvenes se vuelven tristes y viejos y los corazones de fuego se hielan
Pero juramos ser hermanos de sangre contra el viento,
así que estoy listo para volver a sentirme un niño
y escuchar la voz de tu hermana llamándonos de vuelta al hogar a través de los campos
Bien, quizá podamos encontrar nuestro propio lugar
guiados por estos tambores y guitarras.
Hermanos de sangre en las noches de tormenta con una posición que defender:
No retirarse, no rendirse.
Ahora en la calle las sombras crecen,
Las paredes de mi habitación se cierran
Se que sigue habiendo una guerra ahí fuera
y puedes decir que ninguno podremos ganar.
Quiero dormir bajo un cielo limpio, en la cama de mi amante
con todo un país abierto ante mis ojos
y con estos sueños románticos en mi cabeza

martes, 17 de noviembre de 2009

Publicamos "Tierra y Destino"

Este mes publico Tierra y Destino mi tercera novela histórica, en esta ocasión escrita con mi buen amigo y "maestro" Antonio Castro. Contamos la historia de dos viejos soldados, uno británico y otro francés, enfrentados a lo largo de las décadas desde la Guerra de Independencia hasta que se encuentran en una zona agreste y dura: la frontera entre Extremadura y La Mancha, en plena Guerra Carlista (1835). Espero que os resulte tan entretenida como a nosotros escribirla. Aunque tengo que reconocer que escribir a medias no ha sido fácil: hay que adaptarse al estilo del otro, sacrificar ideas propias por el bien de la obra y tener mucha humildad (esto último puede ser muy duro para un escritor). Así que esta novela me ha enseñado muchas cosas, como experiencia literaria y vital. Como ya he dicho, no ha sido fácil, pero al final hemos conseguido terminar una novela lo suficientemente interesante para que una editorial haya apostado por ella. También podíamos haber dejado el proyecto a medias o simplemente dejarlo dormir en el fondo de un cajón: eso no va con nuestros caracteres. En cualquier caso, para mi, Tierra y Destino ya ocupa un lugar muy importante entre mis obras, porque está cimentada sobre una confianza inquebrantable. Hay relaciones selladas con sangre: Antonio y yo somos desde ahora "hermanos de tinta". Os dejo una canción del Loco que trata de amistades incondicionales, "Hermanos de Sangre":